Hace tiempo que tenía ganas de escribir de este tema, creo que sólo lo había mencionado en mi artículo "5 cosas que nadie te dice sobre tu tratamiento de cáncer de mama" y tengo que decir que fue una de las cosas más difíciles del tratamiento. Al parecer no hay mucha evidencia científica de que esto pasa, pero la realidad es que si, el tratamiento afecta nuestro cerebro.
Se le llama “chemo brain” a los cambios en la memoria, la atención, la concentración y la capacidad para realizar diversas tareas mentales, que están asociados a la recepción de tratamientos de quimioterapia para el cáncer. Algunos estudios lo definen como: déficits cognitivos o disminución del funcionamiento neuropsicológico y en los últimos años, se ha hecho más énfasis en estos fenómenos como un efecto secundario de la quimioterapia.
Así que les cuento lo que a mí me pasó unos meses después de haber terminado mi tratamiento de quimioterapia: ¡me sentía totalmente tonta, idiota, lenta…pen…..a!
Ante situaciones similares no sabía cómo reaccionar, era como si acabara de entrar a trabajar y no supiera nada de mi posición ni mis tareas. Me sentía como en el primer día de clase en la escuela, donde tienes que preguntarles a todos hasta dónde está el baño. Muchas veces, al asignárseme tareas, sobretodo de chamba, me daba cuenta que no tenía idea de cómo empezar, como si tuviera la cabeza hueca.
Y la verdad me angustié mucho, pensé literalmente que la quimio me había fundido el cerebro. Mi doctora me decía que es un concepto no comprobado y no le dio tanta importancia, en cambio yo, me sentía tarada por la vida.
Platiqué con mi esposo y sólo con un par de amigos, estaba aterrada de verdad de perder mi trabajo y que se dieran cuenta los demás. Afortunadamente eso no pasó. Era algo sólo evidente para mí, por suerte.
Mi esposo no lo notaba, pero yo sentía que iba además mucho más lenta por la vida, tardándome siglos en solucionar cosas o en tomar decisiones. Fue duro, dudé mucho de mi…hasta que me topé con mi maestro y doctor en medicina china tradicional que de entrada me enseñó estudios que demuestran este efecto de la quimioterapia y lo mejor, me explicó que pasaría y que lo más importante era que tuviera paciencia conmigo, que esto iba a pasar en unos meses más. Y me ayudó con maravillosas hierbas chinas a mejorar mis procesos de desintoxicación que estoy segura fueron claves para volver a la normalidad mental.
Si te está pasando lo mismo, o estás aun en tratamiento, quiero que sepas que no eres la única, millones de pacientes de cáncer alrededor del mundo sufren de lo mismo y hay muchas cosas que puedes hacer para ayudar a tu mente a superar los efectos del tratamiento.
Te comparto 6 cosas que puedes hacer para superar el famoso “chemobrain”:
1. Practicar el “mindfulness”
El mindfulness o atención plena es la capacidad de concentrarnos en nuestra atención y nuestra conciencia. Y aunque es un término psicológico y hoy una gran escuela de estilo de vida, la idea es poner nuestra atención plena o completa en una sola cosa que hagamos. Es no sólo hacer una cosa a la vez sino poner toda nuestra atención en ello. Existen muchos estudios de productividad que se fundamentan en estas técnicas y es bien sabido también que somos más eficientes cuando nos concentramos de lleno en una sola cosa.
Cualquier tipo de Yoga, meditación o ejercicio de respiración te va a servir muchísimo. Este tipo de ejercicios te ayudarán a tolerar los momentos difíciles y mejorar tu salud mental, la memoria y la retención de ideas.
2. Hacer ejercicios cerebrales
Ejercicios como el sudoku, crucigramas y rompecabezas te serán de mucha ayuda para ejercitar el cerebro. Esto es importante para que el cerebro recupere algunas de sus habilidades cognitivas y se sienta en constante movimiento a pesar del “chemobrain”.
3. Hacer un poco de ejercicio físico
Si te sientes muy cansada o con pocas ganas de hacer ejercicio, no hace falta que vayas al gimnasio por horas. Una caminata sencilla es más que suficiente para oxigenar tu cuerpo y ayudarle al cerebro a desintoxicarse de todo lo que recibe durante la quimioterapia, además de que te vas a sentir más relajada.
Recuerda que se trata de poner a circular el oxígeno en nuestra sangre y por consecuencia llegará al cerebro. Así que, si no tenías pretexto para moverte, aquí tienes al primero.
4. Atrévete a pedir ayuda
No tengas miedo de pedir ayuda, el primer paso para superar este tipo de condiciones durante el cáncer de mama es aceptar que vas a necesitar ayuda a lo largo del proceso.
Pide a tus amigos y familiares que anoten cosas importantes para ti, así tienes dónde recurrir cuando sientes que algo se te olvida.
Tienes que aceptar que es normal olvidar cosas y estar en todo cuando pasas por una enfermedad como ésta. No pasa nada, compártelo con la gente más cercana a tu lado, pide y acepta ayuda.
5. Trabaja en tus fortalezas
No te dejes vencer, recordar todo lo que haces bien es un buen ejercicio de motivación cuando sientas que el “chemobrain” quiere vencerte. Enfócate en lo que sí puedes hacer y trabájalo y disfrútalo. Esta condición es normal y no va a durar para siempre.
6. Acéptate y ten paciencia contigo
Como te decía, no es algo que dure para siempre. Aprovecha este momento para aprender a hacer las cosas de diferente manera y ten mucha paciencia contigo. No te juzgues, no te castigues, no te presiones de más. Acéptate y date tiempo.
Por último, es algo sencillo pero importante, tú eres más consciente de tus obstáculos que las demás personas. Trabaja en tu autoestima y no tengas miedo de aceptar que habrá momentos en lo que no puedas controlarlo todo.
Comentários