
Iniciar tratamiento de cáncer de mama es abrumador y preocupante. No estás loca, es normal sentir miedo aterrador a lo que viene.
Sentirás miedo a los efectos secundarios, te dará mucha ansiedad pensar en si podrás seguir trabajando y cuidando a tus hijos, te dará mucho miedo imaginar que no funcione el tratamiento que has decidido seguir, que se salga de tu presupuesto, y así como yo, seguro te aterrará pensar en que necesitarás ayuda para todo.
Desde ahora te lo digo, es muy importante que aprendas a controlar tu miedo a ese futuro, pues vivir con este permanente sentimiento puede: